«Salud mental y consumo de sustancias neuroestimulantes para el rendimiento académico» fue el nombre del webinario organizado por el Programa Interuniversitario Consciente, dependiente del Consejo de Rectores de Universidades de Valparaíso (CRUV), que tuvo por objetivo brindar información sobre la temática a los estudiantes de educación superior, pues son quienes más se enfrentan a este tipo de ingesta.
El seminario en línea contó con la participación de dos exponentes: el primero fue Juan Sandoval Moya, doctor en Psicología Social y docente titular de la Escuela de Psicología de la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad de Valparaíso, quien se refirió al exitismo, la obsolescencia, las relaciones humanas y la transformación de lo privado y lo público como características propias de la sociedad actual, y que influye a la hora de explicar los problemas relacionados con la salud mental.
“Vivimos en una sociedad en donde todo y todos se vuelven objetos de consumo, lo cual desarrolla un tipo de vida en la que nunca nos saciamos y estamos en una permanente obsolescencia subjetiva; es decir, en donde todo es continuamente desechable y caduco. Por otra parte, vivimos en la época digital en la que todos estamos conectados, pero más distantes que nunca, ya que las relaciones humanas se han ido desintegrando”, sostuvo Sandoval.
Al mismo tiempo, manifestó que nos encontramos en una sociedad en la que el espacio privado está siendo colonizado, pues cada vez es más difícil determinar qué es lo privado al estar sometida constantemente a la mirada de otros, entendida como la sociedad del espectáculo. “Hoy, no hay tiempo que perder, pues vivimos en la sociedad del rendimiento, en la cual no hay espacio para el fracaso, ni tampoco para la cooperación entre personas”, manifestó el especialista.
El segundo exponente fue Julio Riquelme Alcázar, médico cirujano, especialista en Neurología Adulto y magíster en Ciencias Biológicas, mención neurología celular y molecular, quien abordó las características y efectos de los fármacos, y su relación con la concentración y un posible mejor rendimiento en el proceso de estudio de universitarios, los cuales ingieren y/o abusan de estas sustancias con el fin de obtener mejores resultados académicos.
“Vamos a dejar claras algunas cosas acerca del consumo de neuroquímicos: primero, no existen evidencias experimentales de que mejoren el rendimiento académico en adultos sanos; segundo, existen muchos efectos adversos asociados a su uso e importante potencial de abuso/dependencia; y tercero, existen otras maneras no farmacológicas para optimizar un mejor aprendizaje”, indicó Riquelme.
¿Cómo podemos optimizar el aprendizaje? Riquelme explicó que es fundamental conocer el funcionamiento de nuestro cerebro. “El aprendizaje de información requiere de mucho más tiempo invertido; es decir, el proceso de aprender algo nuevo demanda una sistematización de aprendizaje. Lo otro que hay que tener en cuenta es que olvidar algo es propio de aprender algo nuevo, es natural, si además tenemos en cuenta que la retención a largo plazo es pobre”, finalizó el neurólogo.
Ambos profesionales aseguraron que el contexto pandémico por el que estamos atravesando acentuó aun más los problemas de los estudiantes, llevándolos a una situación más compleja en relación a la salud mental y también a un posible aumento en el consumo de sustancias para aumentar el rendimiento en las universidades.
UPLA.cl
Noticias de la Universidad de Playa Ancha Dirección General de Comunicaciones
