Directores de carreras de la Facultad de Humanidades hablan del reencuentro con sus estudiantes

Entusiastas, alegres y motivados. Así describen los seis directores de carreras de la Facultad de Humanidades, a los estudiantes que ven por primera vez en forma presencial, tras dos años de virtualidad que generó la pandemia. Estas apreciaciones, que surgen tras el contacto directo con los jóvenes en estas primera semanas, dan cuenta del impacto emocional que los reencuentros han generado entre ellos. Sin embargo, desde el punto de vista académico, algunos directores también advierten cierta falta de autonomía para enfrentar la vida universitaria, razón por la cual, la orientación que puedan recibir, será importante para su proceso de adaptación a la vida universitaria.

Compartimos con ustedes las palabras de los académicos.

Yasmín Díaz Saldés, directora carrera de Pedagogía en Filosofía:
“Mi impresión es muy positiva. Nosotros organizamos una bienvenida general, porque queríamos reencontrarnos con todos nuestros estudiantes y con su cuerpo docente, porque la mayoría de los académicos son nuevos y las tres últimas generaciones solo nos conocen por pantalla; por eso era súper importante, más allá del reencuentro académico, este reencuentro a nivel grupal. Mi impresión es que han valorado mucho la presencialidad. Los veo muy contentos, muy entusiasmados de reconocer y conocer sus espacios. Sí percibo una dificultad muy puntual, y es que están compartiendo su vida académica con el ámbito laboral, lo que es un tanto complejo, pues los ramos requieren presencialidad. Sobre el ámbito emocional, percibo que algunos estudiantes no entienden lo que es la vida universitaria y no hay mucha autonomía. En ese contexto, el rol de los directores de carrera es mucho más de orientación y apoyo en los procesos académicos, como las inscripciones de ramos, para que aseguren lo que es mejor para ellos”.

Marisol Castro Romero, directora de Administración Turística Multilingüe:
“Los estudiantes se han visto y relacionado con bastante normalidad. El primer año es un curso bastante numeroso, igual que el segundo, y la verdad es que todos (también los de tercer año) estaban muy deseosos de entrar a la universidad, porque no la conocían. Los de cuarto y quinto año ya son más autónomos, pero les ha costado más, porque muchos de ellos estudiantes están compatibilizando el estudio con actividades laborales. Entonces, la presencialidad, desde ese punto de vista, genera alguna dificultad”.

 

José Cerpa, director de Pedagogía en Historia y Geografía:
“Lo que he apreciado, es que lo más importante para ellos ha sido poder encontrarse, reconocerse y escucharse. Sentir que su identidad es parte de un grupo y que deben redescubrirse nuevamente, porque no son los mismos de antes. Considero que también es muy importante el reencuentro entre profesores y estudiantes, porque eso nos fortalece como universidad . Además, es parte de un proceso de volver a lo cotidiano, a lo natural de la educación, independientemente del sistema en el que se ejecute”.

 

Lizka Muñoz Ibaceta, directora de Pedagogía en Castellano:
“A los estudiantes que se matricularon el 2021 y 2020, han regresado casi todos y los veo como alumnos de primer año, en el sentido de que muchos de ellos están conociendo la universidad. La semana de inducción les permitió vincularte, conocerse y están ansiosos y motivados por haber regresado. Y, desde el punto de vista académico, aún no han desarrollado algunas habilidades blandas. Es un proceso”.

 

Maura López Riveros, directora de Pedagogía en Inglés:
“Es importante destacar que, independiente de algunos pormenores o situaciones emergentes en este contexto, que tiene que ver con las salas, con retomar este contacto constante, observo de manera muy positiva este retorno a la presencialidad. Creo que los estudiantes se vuelven a sentir nuevamente conectados, que la información fluye de mejor manera, independiente de que hoy ya estamos acostumbrados a los medios de comunicación digitales, porque algunas plataformas llegaron para quedarse, lo que es muy bueno, pero la presencialidad, implica compartir con los compañeros y con sus profesores. Es algo que los estudiantes valoran mucho. Están muy contentos, porque se restablecen los vínculos y, en algunos casos, se forman vínculos. Se trata de una red de apoyo que los ayudará a llevar este proceso como estudiantes en formación, de mejor manera”.

Jorge Ramírez Jiménez, director de Traducción e Interpretación Inglés-Español:
“Los he visto con mucho entusiasmo por volver a la presencialidad, por reencontrarse con la universidad, por conocer la universidad, porque estas dos últimas generaciones que entraron, tuvieron clases virtuales, lo que fue complejo para todos. Sin embargo, ese carácter gregario de los seres humanos, nos obligó a retomar el contacto. He visto a los estudiantes con muchas ganas de entrar a clases y estar acá, especialmente a los mechones, quienes consultaban insistentemente por las actividades. Quieres cursan segundo o tercer año, también viven el proceso de conocerse, conocer los espacios y el ambiente universitario, que enriquece tanto la vida de los estudiantes”.