Tras el cierre del taller que trató las temáticas de “Alcohol y Drogas”, se dio paso a la entrega de la certificación correspondiente a los participantes, oportunidad en que también recibieron diplomas los alumnos del taller de Monitores en Calidad de Vida, actividad que se llevaba a cabo los días sábado.
Ambos talleres formaron parte del proyecto «Promoviendo la calidad de vida y los estilos de vida saludables”, que fue elaborado por la Dirección General de Desarrollo Estudiantil (DGDE) y cuenta con apoyo del Fondo de Desarrollo Institucional (FDI) del Ministerio de Educación.
La certificación se realizó en la sala Carlos Pantoja de Casa Central y contó con la presencia de Claudia Herrera, coordinadora administrativa y logística del proyecto de Calidad de Vida, quien durante la ceremonia de cierre entregó palabras de agradecimiento a los docentes y alumnos, además de algunas informaciones.
Herrera afirmó que “los estudiantes están motivándose cada día más y quieren que la universidad les entregue esta oferta, lo que me parece excelente. Además, los profesores que hemos tenido son docentes que motivan, cercanos a los estudiantes, y eso facilita aun más que ellos puedan ver que la universidad hoy en día tiene una nueva iniciativa”.
Paloma Gómez, tecnóloga deportiva y profesora del taller de Monitores en Calidad de Vida, realizó una buena evaluación en torno a la actividad que lideró: “Los alumnos son súper agradecidos y motivados, y nosotros nos quedamos con la idea a futuro de poder hacer un taller más largo, de poder articular cosas más prácticas. En realidad, eso va vinculado al tema del tiempo. Pero como primera evaluación, súper bien, los jóvenes se van con herramientas básicas que son fáciles de aplicar”.
En cuanto a Claudio Berríos, académico de la Facultad de Ciencias Naturales y Exactas y docente del taller acerca de Alcohol y Drogas, quiso resaltar dos aspectos con respecto a la participación de los jóvenes: “El primero, los estudiantes son muy ordenados, llegaron todos a tiempo y, en segundo término, se nota en ellos mucha avidez por comprender contenidos, por profundizar con un criterio muy universitario, realmente de alma máter de la UPLA”.
Respecto a las visiones de los participantes, Paulina Toro, estudiante de Educación Física y asistente al taller de Monitores en Calidad de Vida, recalcó que “no sólo aprendimos a predicar que hay que tener una buena calidad de vida activa, sino que también ejemplificar, motivar a la gente, y esa va a ser nuestra función”.
En tanto, Andie Pineda, monitora y asistente al taller sobre Alcohol y Drogas, explicó en lo concerniente a lo visto en clases, que el docente “nos dio tips para trabajar con jóvenes, lo que es demasiado importante para quienes estamos en el área de la pedagogía, ya que son útiles para manejar situaciones abusivas de alcohol y drogas”.
La actividad concluyó con un “coffee break”, durante el cual los jóvenes pudieron compartir experiencias y pasar un rato ameno junto al resto de los asistentes.