«Ha transcurrido el plazo que la Constitución establece para la aprobación del presupuesto nacional 2012. Constatamos con dolor y decepción que las expectativas cifradas en una definición de política para el fortalecimiento de la educación pública chilena, se han visto frustradas después de tan largas reflexiones, paralizaciones y movilizaciones estudiantiles y sociales.
«Lamentablemente, no existió nunca en ese largo proceso un plan de largo plazo que permitiera resolver en forma real y visionaria el problema de la calidad y equidad de la educación pública, haciendo una inflexión con un modelo que ha demostrado ser inadecuado y que ha estado más centrado en favorecer y profundizar un mercado de la educación, que en preocuparse por las personas, las familias, la equidad, la calidad para todos y la igualdad de oportunidades efectivas.
«El presupuesto aprobado, más allá de los montos que en definitiva se sancionaron, no da una señal clara de política pública orientada a relevar el rol de la educación pública y estatal, haciendo las correcciones correspondientes.
«Es justo también decir que, con todo, ha habido algunos avances en temas puntuales no necesariamente estructurados en un plan. Me refiero al apoyo -aún débil- a la educación superior en regiones, incremento de becas y créditos para una parte aún insuficiente de la golpeada y sacrificada clase media que ha venido por años hipotecando su futuro, más recursos para ciencia y tecnología, entre otros.
«El modelo ha quedado intacto y se repiten los errores cometidos por los gobiernos anteriores. Para dar un salto verdadero y duradero, en un país con tanta desigualdad en la distribución de la riqueza, es necesario que los que tienen más hagan un sacrificio, una mayor contribución, un aporte solidario a través del sistema tributario. La iniciativa de que este fondo sea permanente y requiere una reforma tributaria va en el sentido correcto.
«Tenemos la esperanza de que los desaciertos en la aprobación presupuestaria de 2012, las carencias y las omisiones, sea reparado en el proyecto de ley que regule la distribución del fondo de cuatro mil millones de dólares prometido, que esa distribución se haga de manera más estratégica, que antes de entregar recursos del Estado, se verifique el cumplimiento de la ley en materia de lucro, se garantice la calidad, sistemas trasparentes de admisión y se opte por el fortalecimiento de la educación estatal y pública.
«Finalmente, esperamos que se cumpla la promesa de dictar una ley específica para las universidades estatales y que en ella se contemplen algunas de las omisiones que se develan en la ley de presupuesto, creándose un fondo para universidades estatales (FUE), que concrete el trato que por su naturaleza y misión deben tener universidades que pertenecen a todos los chilenos, además de las normas que requieren en los ámbitos de la gestión, el desarrollo y el compromiso con sus valores y principios en cuanto producen bienes nobles y públicos en beneficio de la sociedad».
Patricio Sanhueza Vivanco
Rector
Universidad de Playa Ancha
UPLA.cl
Noticias de la Universidad de Playa Ancha Dirección General de Comunicaciones
