Por segundo año consecutivo estudiantes de Pedagogía en Educación Musical de la Facultad de Arte de la UPLA se organizaron y llevaron adelante un importante proceso eleccionario que les permitió elegir y dar continuidad al Centro de Estudiantes de la carrera por todo el 2024, y cuya orgánica fue retomada recién en 2023 tras varios periodos de inactividad.
En ese contexto la lista única compuesta por Catalina Castañeda (presidenta), Francisca Torres (vicepresidenta), Javiera Lepio (secretaria), Paolo Matamala (secretario de bienestar) y Martín Cruz (extensión, cultura y comunicaciones) fue elegida por 69 de los 74 sufragios emitidos, lo que representa que más del 50 por ciento de las y los estudiantes se hicieron parte de este fundamental acto eleccionario y de participación.
Catalina Castañeda explicó que esta es una instancia democrática que busca crear una real representación de las y los estudiantes ante las autoridades de la Facultad de Arte como de la universidad. “Creo que es clave este tipo de organización, primero para la carrera, pero también para inspirar a las demás a generar sus propias organizaciones. Hoy tenemos espacios donde no hay una representación adecuada, por eso es importante tener algo más tangible para dar a conocer la opinión del estudiantado propiamente tal”.
Respecto a las proyecciones del nuevo Centro de Estudiantes de la carrera de Música, la alumna de segundo año reconoció que se centraran en: Generar un programa y trabajo conjunto de inclusión extensivo a la Facultad, generar una mayor comunión entre sus integrantes, trabajar en los estatutos por carrera, involucrarse en apoyar el proceso de acreditación de este 2024, revisar la malla curricular, promover trabajo conjunto intercarreras e interdisciplinarias y abordar los distintos desafíos que quedaron pendientes de la gestión anterior.
Mauricio Concha, quien lideró el Centro de Estudiantes saliente, expresó que mantener la orgánica de la carrera tras un periodo de fragmentación de la organización previo a 2023 es relevante, ya que, según sus palabras, es la única forma real de solucionar las cosas a mediano y largo plazo, pero también permite propiciar, por medio de la organización estudiantil, un clima proactivo al interior de la Facultad.
“Por eso quiero hacer un llamado a las demás carreras para que se organicen y conversen. Para ello se necesita generar debates, discutir, cuestionarnos y ser críticos, pero organizados para realizar actividades y buscar el diálogo con las autoridades para resolver las cosas en conjunto. Es decir, tenemos una gran responsabilidad en la coconstrucción de la universidad más ahora que la triestamentalidad es un hecho por ley. Lo central entonces para las demás carreras es que se organicen y luego generen la formalización de un Centro de Estudiantes o una orgánica más establecida para constituir una conexión entre estudiantes, funcionarios y académicos”, planteó.