Colores, música, risas y mucha alegría se vivió en la fiesta de disfraces con la cual el Servicio de Bienestar del Personal de nuestra casa de estudios concluyó la VIII versión de la Escuela de Verano 2023.
Después de una intensa semana de actividades, que incluyó piscina, juegos, talleres y salidas a terreno, los 60 niños y niñas de entre 7 y 15 años participaron de una inédita celebración, donde la creatividad y el entusiasmo fueron los grandes protagonistas de la jornada.
A modo de evaluación anticipada, la jefa suplente del servicio, Pilar Silva Ortiz, calificó como muy exitosa la ejecución del programa, que benefició a los hijos e hijas menores de los asociados.
“Si bien la próxima semana haremos una evaluación más en profundida con todo el equipo, puedo decir que estamos muy contentos con el resultado de esta Escuela de Verano. Además, quiero dar las gracias a los padre por haber confiado en nosotros, así como también agradecer a todas las personas y unidades que participaron en la coordinación con nosotros e hicieron que esto fuera posible”, dijo la asistente social.
Concretamente, mencionó la colaboración de la Dirección General de Prevención de Riesgos, Imprenta y la profesional nutricionista del casino de la Universidad, además de la Secretaría Académica de la Facultad de Ciencias de la Actividad Física y del Deporte, por facilitar los espacios como gimnasios y piscina.
Se trata del tradicional programa social que benefició a los hijos e hijas menores de los asociados, el cual buscó entregar apoyo durante la jornada laboral a los asociados, proporcionando un espacio de cuidado, entretención y aprendizaje durante la jornada laboral de los padres.
Entre las actividades que desarrollaron los niños y niñas destacaron el área física y recreativa, acciones artístico-culturales, paseos y actividades socioeducativas, todo en un contexto lúdico y comunitario.