«De todo lo expuesto en las dos primeras partes de esta serie de artículos, se deben dar hechos que en su magnitud son garantes de un aprovechamiento sustentable y sostenible para la reconfiguración de los recursos del Valle del Aconcagua, en particular, de las provincias de Los Andes y San Felipe.
En años recientes, tuve la ocasión de conocer a uno de los hombres más cultos que en mi vida pude tener el gusto de conversar, me refiero al Reverendo Padre Eugenio Duque Noreno (Q.E.P.D.), quien con generoso sentido de compartir sus conocimientos, me permitió descubrir uno de los más hermosos templos católicos de Chile central y que, a juicio de este investigador en patrimonio local, es quizá uno de los mejores ejemplos del neoclásico, me refiero a la Iglesia de San Antonio de Padua del Almendral.
Precisamente, esa santa edificación en la actualidad está siendo remozada con una brillante elección de tonalidades en su fachada principal, dándole un sentido de magnificencia que me llevó a pensar que ese recurso patrimonial debiese ser considerado junto a otros excelsos ejemplos de arquitectura eclesiásticas, como una alternativa de gran potencial turístico, en que a los visitantes que perfectamente podrán ser turistas, los dejaría asombrados por el rico y valioso estrato cultural que esa fe ha dejado en el Aconcagua Superior.
Otra intervención digna de exaltar es el Museo de la Iglesia del Buen Pastor, que muestra una colección de objetos sacros de primer nivel en un escenario donde la museografía y museología fueron diestramente llevados a un nivel óptimo.
Si a este centro cultural se le añade la Catedral diocesana, se está en presencia de una posibilidad donde el mismo Obispado, la I.M. de San Felipe, la Cámara de Comercio y Turismo, Sernatur y otros organismos, podrían asociarse en la búsqueda de una oferta patrimonial con alcances de gran cuantía, que favorecería el flujo de visitas a las que se debiese dar un valor agregado como es, por ejemplo, con guías de turismo locales debidamente formalizados, como es una agrupación con personería jurídica y el asesoramiento, por ejemplo, de la Sociedad de Historia y Arqueología de Aconcagua, o bien, de la Universidad de Playa Ancha, campus San Felipe.
A lo indicado, también es válido de consignar la comuna de Putaendo, la cual orientó parte de su accionar no solo municipal, sino de la comunidad en pro de manifestarse como un destino turístico con hermosos atractivos naturales y culturales, cuyos resultados han sido muy favorables.
En estos casos, creo que la predisposición a llevar a materializar un gran acuerdo intercomunal e interprovincial, no puede dejarse de lado a la tercera edad que, con su experiencia y conocimiento de las realidades de su entorno, darían y serán un provechoso y real aporte a esta nueva fórmula de revalorización y revitalización del Valle.
Sin embargo, para llevar a efecto lo planteado, se deben dejar de lado las posiciones de cualquier índole y hacer un trabajo transparente, coherente, disciplinado, en el que prime un objetivo común y un beneficio colectivo».
Gastón Gaete Coddou, geógrafo y académico de la Facultad de Ciencias Naturales y Exactas, Universidad de Playa Ancha
Columna de opinión publicada en diario El Trabajo de San Felipe, el viernes 21 de junio de 2019.