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“Buscar una problemática, determinar cuál es la intervención que hay que hacer, evaluar previamente, aplicar la intervención, volver a evaluar y luego de aquello tomar una decisión. Eso hace la diferencia al momento de resolver un problema, empleando método científico”, fueron las palabras del tecnólogo en deportes y recreación formado en la Universidad de Playa Ancha, Daniel Zapata Gómez, invitado especial en la inauguración del Año Académico 2025 de la Facultad de Ciencias de la Actividad Física y del Deporte.
Luego de la destacada presentación del Ballet Gimnástico de nuestra casa de estudios, dirigido por la académica Mariela Peralta Ferroni, el actual preparador físico de la selección chilena de hockey césped damas y expreparador físico de la selección chilena de voleibol femenino entre 2017 y 2022, expuso sobre la “Contribución de las Ciencias del Deporte en el alto rendimiento. Una propuesta basada en la experiencia”.
El también responsable del Laboratorio de Fisiología del Deporte en el Centro de Alto Rendimiento (CAR) del Instituto Nacional de Deportes, destacó que el mundo del deporte y la recreación está en constante evolución, impulsado por avances tecnológicos y nuevas tendencias, por lo que es fundamental la investigación científica orientada al desarrollo de nuevas metodologías centradas en el usuario.
“Pero unido a lo anterior tenemos que ser capaces de manejarnos en el entorno, eso también hace la diferencia, porque no sirve de nada tener un gran conocimiento si no lo puedo llevar a cabo, si no puedo ser capaz de convencer a un deportista para ofrecer una solución con base en la ciencia. El conocimiento verbalizado en una frase hace un cambio tremendo”, agregó.
Zapata sostuvo que el trabajo multidisciplinario es fundamental en el ejercicio de la profesión, puesto que aporta una gran riqueza y abre un abanico de posibilidades que un enfoque individual no podría brindar. “Soluciones más integrales, innovadoras y adaptadas a las necesidades reales de los deportistas es lo que aporta el trabajo con profesionales de distintas áreas. Lo anterior, posibilita una mejor comprensión del rendimiento y del bienestar”.
Respecto de la formación que recibió en esta 
casa de estudios, dijo que uno de los mayores aprendizajes fue “la humildad de poder trabajar con lo que tengo, no con lo que quiero. Me enseñaron a fabricar mis propios materiales, a resolver problemas y a investigar para después exponer a los compañeros lo indagado. A eso sumo una muy buena base de biomecánica, anatomía y fisiología del ejercicio, entre otras asignaturas”.
Desafíos y oportunidades
En este nuevo año académico, el decano Hernaldo Carrasco Beltrán, planteó los desafíos que la Facultad de Ciencias de la Actividad Física, la primera y única en su disciplina, debe abordar. “Hoy nuestro país se encuentra en un punto de inflexión. Los desafíos del presente son claros, con una sociedad con altos niveles de inactividad física, brechas de acceso a entornos saludables, desigualdad en la práctica físico deportiva y la necesidad de políticas públicas que promuevan estilos de vida activos y saludables”.
Igualmente, se refirió a que es momento de oportunidades. “Están los avances tecnológicos, el trabajo interdisciplinario y la valoración creciente de la actividad física como factor relevante al momento de construir 
comunidades más activas y saludables. Por eso proyectamos nuestro futuro con convicción. Nuestra Facultad se prepara para fortalecer sus áreas de investigación, para consolidar nuevos programas de postgrado y formación continua, para ampliar su vinculación territorial y comunitaria y para avanzar hacia una formación cada vez más inclusiva, crítica y situada”.
Carrasco invitó a no olvidar que “somos herederos de un sueño que comenzó hace ya casi cuatro décadas, tiempo en que hemos formado a generaciones de profesionales de la Educación Física y licenciados en Ciencias de la Actividad Física”.
