“Hace una semana atrás llamábamos la atención sobre la forma en cómo escalaba el conflicto estudiantil y las movilizaciones universitarias en el país. En ese escenario crítico, decíamos, sólo una actitud de diálogo podía conducir a soluciones que terminaran por reponer la actividad en los campus y obtener respuestas para las demandas que se cobijan en la idea de defensa de la educación pública universitaria.
“Debíamos apelar -explicábamos- a ese factor esencial que corresponde a la naturaleza de toda universidad y que se traduce históricamente en el papel preponderante que se le otorga a la contrastación racional y razonable de ideas cuando se enfrenta un momento de crisis. Para que eso ocurriera, debían concurrir con serenidad, ánimo comprensivo y espíritu libre de prejuicios, aquellos que tienen la responsabilidad de velar, como en este caso, por el sistema educacional y universitario: el Ministerio de Educación, el Consejo de Rectores, los estudiantes.
“Los acontecimientos conocidos esta semana, advierten que ese proceso se puso en marcha alcanzando algunos objetivos que son importantes. A la demanda por más recursos para la educación pública, la respuesta es que habrá un fondo de revitalización de universidades públicas en la forma de 75 millones de dólares que se repartirán según el tipo de institución, su carácter regional y la situación socioeconómica de los estudiantes. A la vez, se agrega que se reajustará el Aporte Fiscal Directo, según alza del sector público y no del IPC.
“En la respuesta ministerial se anuncia que se fortalecerá el fondo de crédito universitario, con la ampliación de beneficios a partir de la reprogramación de deudas, junto con bajar las tasas de interés del crédito con aval del Estado.
“Al momento de estas respuestas del Ministerio de Educación, seguía pendiente una solución que permita regular el problema del lucro, para cuyo fin se ha propuesto la creación de una Superintendencia de la Educación Superior, materia en la que no se ha progresado y, naturalmente, en la que se esperaría también progresar.
“A pesar de lo avanzado, hay aspectos que deben analizarse; consideramos, por ejemplo, que es deseable complementar los aportes directos de libre disposición y que sean distribuidos equitativamente tomando en cuenta las injusticias históricas que este tema ha tenido en el tiempo”.
Patricio Sanhueza Vivanco
Rector
Universidad de Playa Ancha