Noticias de la Universidad de Playa Ancha Dirección General de Comunicaciones
Ingresar, permanecer y egresar de las diferentes universidades a las que han postulado, es uno de los nuevos desafíos que las unidades de inclusión de estas instituciones se han propuesto para las personas en situación de discapacidad.
Así se planteó en la II Jornada de Orientación para equipos de apoyo de establecimientos educacionales , organizada por la Comisión de Discapacidad del Consejo de Rectores de la Universidades de la V Región , CRUV, que es presidida durante el 2018 por María José Maturana, encargada de la Unidad de Inclusión de la Universidad de Playa Ancha.
La actividad realizada en la Escuela de Ingeniería en Química de la PUCV, dio a conocer el proceso de transformación que se están vivenciando en las instituciones de educación superior, contribuyendo a garantizar la igualdad de oportunidades e inclusión social de los estudiantes en situación de discapacidad.
En este sentido, Carolina Vidal, Directora del Programa de Inclusión Académica de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso, en sus palabras de bienvenida destacó el rol que cumplen instancias como éstas para sensibilizar a los distintos actores y establecimientos educacionales, en las temáticas de inclusión y poder coordinar con sus estudiantes el acceso igualitario a los distintos programas que las universidades ofrecen.
Alejandra Maldonado, antropóloga y Encargada del Programa de Inclusión y Ajustes en la rendición PSU, del Departamento de Evaluación, Medición y Registro Educacional, DEMRE, informó que desde 2017 se empezaron a realizar adecuaciones de accesibilidad para las personas en situación de discapacidad de una forma más sistemática, anteriormente estas personas eran categorizadas como “casos especiales”.
Estos ajustes, continuó Alejandra Maldonado, han dado como resultado el aumento de postulantes, logrando , por ejemplo, que en la región hayan dos estudiantes realizando estudios, uno de ellos con puntaje nacional, lo cual es muy significativo: “De este modo, las autoridades caen en cuenta que estos estudiantes sí son de alto rendimiento y no todos los estudiantes en situación de capacidad son un problema académico y de infraestructura”.
Desde el 2017 que se están sistematizando estadísticas sobre el proceso de rendición de la PSU de las personas con discapacidad no sólo física, sino que también con trastornos del ánimo, y se han hecho adecuaciones para que ellos puedan realizar la prueba a través de instrumentos tecnológicos especiales o en salas acondicionadas para su discapacidad específica.
“En el 2018 un 43% de los seleccionados fueron personas con algún grado de discapacidad visual, con discapacidad auditiva, ninguna, y desde el punto de vista de construir datos para la política pública, estas cifras son muy relevante ya que hasta el año pasado no teníamos ningún argumento para indicar que a para las personas sordas esta prueba es una barrera enorme”, dijo Maldonado.
De 730 postulantes que pidieron ajustes para la rendición de la PSU, 432 efectivamente rindieron la prueba y 94 quedaron seleccionados, lo cual significa un avance muy importante para cumplir con el objetivo de mejorar y sistematizar instrumentos y procesos asociados de acuerdo a la normativa nacional. También resulta fundamental fortalecer la capacidad técnica – científica y la evaluación permanente de la población participante, abriéndose un ámbito de evaluación central para mejorar todo el proceso.
Posteriormente, participaron de esta jornada: María José Maturana Otey, Presidenta de la Comisión de Inclusión del CRUV 2018 y Encargada de Inclusión UPLA; Viviana Castrillón Uribe, Encargada Programa PUCV Inclusiva; Pierina Penna Bugueño, Encargada Programa de Inclusión de la Universidad de Valparaíso; y, Marcela Liberona Muñoz, Coordinadora Institucional Programa de Inclusión Universidad Federico Santa María.
